miércoles, 21 de diciembre de 2016

Retratos Escolares.



Allá por los años 40 y 50 del siglo pasado, e incluso antes, en casi todas las escuelas se hacían retratos  a los alumnos y alumnas. Para ello se colocaba al fondo un mapa y ellos sentados en la mesa o pupitre con un libro en las manos. El uso  del mapa estaba  bastante extendido, de ahí que sean muchas las fotos que lo tienen. Con el paso del tiempo el mapa fue sustituido por una estantería de biblioteca, como se puede ver en algunas imágenes. Los retratos se hacían individualmente, pero también en grupos de dos o tres. Sobre todo solían agruparse, si de trataba de hermanos o parientes. No dejaba de ser  esto un recuerdo familiar, que ocuparía lugar preferente en los domicilios.
Por este tipo de fotos podemos ver y conocer la forma de vestir y de peinarse. También como eran los mapas, los pupitres y otros útiles de la escuela.  En nuestra provincia de León,  como en las demás, habrá muchos retratos escolares antiguos, que nos ayudarán a conocer  aspectos distintos de cada lugar. A ver si podemos ver más retratos escolares de las distintas comarcas leonesas. Estas fotos forman parte del libro Joarilla de las Matas. Memoria Fotográfica de un Siglo que publicamos en el verano del año 2014.


miércoles, 14 de diciembre de 2016

Cesar, alcalde de Joarilla y su familia. Imágenes del Pasado.


Cesar con su mujer en Joarilla.
D. Florencio y su mujer con Benita y otros miembros d la familia.
D. Florencio y su mujer en el corral de su casa de Joarilla.

Entre las muchas fotografías que nos dejaron para la publicación del libro Joarilla de las Matas. Memoria Fotográfica de un Siglo, están estas en las que aparece Cesar, que fue alcalde del pueblo y algunos de sus familiares. La verdad es que, el verlas de nuevo, me han situado y recordado el pasado. Y es que D. Florencio, el padre de Cesar, era el médico de Joarilla y lo fue casi toda su vida profesional. Lo mismo que mi padre que era el practicante y en muchas ocasiones trabajaban o iban a trabajar juntos a las casas del pueblo o de los otros pueblos del Ayuntamiento, Valdespino Vaca y San Miguel de Montañán. Y lo solían hacer casi siempre andando, a no ser que hubiese alguna urgencia y el que les avisaba les llevaba en algún tipo de vehículo.
Cuando alguien enfermaba allí estaba rápidamente D. Florencio para atenderle y si era necesario algún tipo de cura o inyecciones al poco tiempo acudía el practicante. Y al día siguiente y los demás días, hasta su curación, la visita era como obligada por parte de ambos. Solo cuando ya estaba bien dejaban de visitarlo. Eso era ser de verdad médico de cabecera o de familia. Toda la gente estaba contenta con su médico y practicante. Ahora toda ya ha cambiado y son más las exigencias y también las quejas si faltan las atenciones. Pero es que el médico y el practicante vivían en el pueblo y convivían con los vecinos, para bien y para mal.
Al tener tres pueblos, los que forman el Ayuntamiento, todos los días o casi todos tenían que hacer el recorrido de uno a otro, para atender o visitar a los enfermos. Y casi siempre lo hacían  a pie, como si de un paseo diario se tratase. Tampoco están muy distantes los tres pueblos entre sí. Recuerdo que mi padre tuvo una bicicleta de las de barra y más adelante y durante un tiempo una moro GAC. Por último, ya mayor, ni moto ni bicicleta, todo el recorrido lo hacía a pie.
Cesar, uno de los hijos de D. Florencio, regresó al pueblo, ya casado, después de algunos años fuera. Y llegó a ser alcalde del Ayuntamiento. Se preocupaba de que las cosas estuviesen bien, incluso fomentó el deporte del futbol, de ahí que aparezca en alguna foto junto al equipo de Joarilla, en el que también está Raúl el árbitro y algunos jugadores suplentes.
Cesar cuando era alcalde de Joarilla, con el equipo de futbol y el árbitro Raúl.
Niños y jóvenes afiicionados al futbol en la eras de Joarilla de las Matas.



lunes, 3 de octubre de 2016

La imagen de hoy: La Pala.



Se trata de un grupo de trabajadores que están descansando unos momentos de su tarea, consistente  en recoger piedra para preparar un camino o carretera. Trabajo que tenían que hacer a mano, o agrupar con ayuda de un rastrillo, y recoger con palas. Y es que su pueblo está dentro de la paramera del sur de León, muy cerca de la tierra de campos, o de los campos de tierra, en donde las piedras escasean, aunque sí las haya y de los más variados tamaños.
Aprovechan la hora del descanso para comer el bocadillo, o lo que cada uno llevase de casa en su fiambrera. Lo que no les falta es la botella o la bota de vino, seguro que el clarete leonés, que se elabora con gusto en el pueblo.
Variedad de expresiones en sus rostros, atentos casi todos al fotógrafo y variedad en su forma de vestir y de calzar. Muchos cubren su cabeza con boina negra, muy al uso en aquellos años. Y a todos se les ve disfrutando del descanso. Pero la pala que han colocado delante de ellos no está abandonada sino a la espera de volver a la tarea.
El fondo del cuadro es una pared de tapial de una nave o corral cercano al pueblo y con puerta trasera de dos hojas, para uso de carros y ganados. Por aquellos años, década de 1960, apenas se contaba con otro tipo de maquinaria agrícola. El trabajo de hombre era fundamental y necesario para todo. Y en este caso mucho más, pues era la única forma de contar con camino o carretera, no de tierra, sino de piedra.
Trabajadores de Joarilla recogiendo piedra para un camino o carretera.

sábado, 13 de agosto de 2016

Imagenes del pasado: El Caño 4.

Con anterioridad ya he publicado algunas entradas más en este blog con imágenes del caño de la Plaza Mayor. Por otra parte también en el libro Memoria Fotográfica de un Siglo hay algunas imágenes del mismo. Y es que era uno de los lugares más frecuentados del pueblo. Y no sólo, por el agua tan agradable que salía por sus tres chorros, sino también por estar en la plaza Mayor, lugar de reunión, descanso y paseo para muchas personas. Alrededer del caño estaban los poyos o asientos de piedra y cemento que eran ocupados mientras se llenaban los cacharros de agua: botijo, cántaro, caldero, etc.
El lugar se cuidaba porque hacía un buen servicio al pueblo, ya que era a donde todos se suministraban del agua para beber y para preparar las comida. E incluso se llevaba para los animales, sobre todo las gallinas. 
Con el tiempo el caño fue a menos, tanto el manantial, como su constucción. Y se fue deteriorando hasta que llegó el momento de su abandono. Fue en los años en que comenzó a instalarse agua corriente ya en las casas, incluso de los pequeños pueblos. Se construyó el depósoto cerca de las Eras y se solucionó el problema del abastecimiento tanto para las casas, como para la cuadras de los animales, bodegas y otros lugares en los que se utilizaba.   
He aquí las últimas imágenes sobre el Caño que habái hace ya años en la Plaza de Joarilla.
Maribel y Ana Belén en la plaza, al lado del caño.
Vicente en su caballo junto al caño.

jueves, 21 de julio de 2016

Joarilla de las Matas. Imágenes del año 1987



En mis frecuentes viajes a Joarilla, en años anteriores  más que en la actualidad, siempre  he llevado y llevo la cámara fotográfica, para plasmar y dejar constancia de lo novedoso del viaje, que siempre hay algo, y más si se trata del pueblo donde naciste.  En él se viven  o reviven los recuerdos del  pasado, al compararlos con el presente.
En este año de 1987 así lo hice, como lo demuestran estas fotografías que hoy publico en el blog El Trébano. Es curioso ver cómo han cambiado las cosas, no la torre ni la iglesia en su exterior, pero sí  algunas de las calles y también las casas.
Y he podido recordar los lavaderos de los cuales no teníamos imágenes cuando publicamos el libro “Joarilla de las Matas. Memoria Fotográfica de un Siglo”.
Me ha llamado la atención la calle Costanilla en la que vivía D. Mere. No lejos de ella estaba la denominada, popularmente, Cuesta de la Perra o Perrina, por lo que cuento en el libro de que los monaguillos estuvieron mucho tiempo buscando y rebuscando las perras de cinco o diez céntimos, que había caído o perdido el cura en dicho lugar.
Y luego hay alguna imagen de otros lugares que seguramente todos los joarillenses reconocerán y se sentirán muy felices con el recuerdo.

 
Calle Costanillas.
Calle La Cárcava.
En primer término Cuesta la Perra.
La cuesta de la perra o perrina.
Lavadero donde se aclaraba la ropa.
Iglesia y plaza.
Iglesia.
Valdelafuente.
Calle Mayor ya cerca de los lavaderos.
Calle Mayor. Al fondo la Alameda.
Plaza de las Escuelas.